miércoles, 29 de enero de 2020

CLAVES PARA ELEGIR COLEGIO.


Con tranquilidad y sin angustias. La elección de colegio debe abordarse así, ya que «aunque hay mucho que mejorar, partimos de la base de que en este país la oferta educativa es buena», comienza Guillermo Bautista, profesor de Estudios de Psicología y Ciencias de la Educación en la Universitat Oberta de Catalunya (UOC).
Y la pregunta que se hacen muchos padres es cómo elegir el mejor colegio para sus hijos. Educación pública o privada, un colegio grande o pequeño, más o menos innovador, religioso o laico… las posibilidades son muchas y las incógnitas, variadas.
Lo primero, el proyecto educativo
Para Bautista, director de un máster de formación de profesorado y experto en pedagogía, lo más importante es el «proyecto educativo» del centro. Pero, ¿de qué estamos hablando? «El proyecto educativo, que suele estar en su página web, va más allá de un texto. Quien quiera conocerlo bien deberá interesarse por hablar con los profesores, acudir a la jornada de puertas abiertas o conocer a otras familias que tengan escolarizados a sus hijos en él. Porque solo así podremos conocer bien cómo trabajan, cuál es su metodología, qué carga de deberes tienen o qué papel dan a los niños y las familias en la educación», explica Bautista.
Aquí no habrá un colegio más bueno que otro, sino uno que se adapte más a lo que busquen los padres. «Porque lo importante es saber cómo pensamos que tiene que ser la educación del niño y que ese colegio case con nuestros principios. Así habrá coherencia en su educación», indica Bautista.
Cercanía al hogar
Que el niño pueda ir andando al colegio es muy importante para Bautista, que subraya lo positivo de que el niño esté «vinculado a la escuela y a su entorno». Un factor que, además, permitirá por lo general que los padres puedan implicarse más en la escuela.
«Hay que entender que la elección de colegio no será un acierto o error cerrado. Porque el proceso educativo dependerá también de cuál sea la relación de la familia con el colegio, si los padres se implican», añade el profesor de la UOC, que subraya que el niño nunca recibe «varias educaciones, sino una sola, que será el conjunto de lo que reciba en el colegio y en casa».
Público o privado, grande o pequeño
Saber si se prefiere un colegio de titularidad pública, concertada (gestión privada de fondos públicos) o privada será un factor que determinará la elección. También si el centro es grande o pequeño. «Aunque a priori un colegio pequeño pueda aportar una relación más familiar, ello depende de la gestión del colegio. También hay que entender que en un colegio más grande el niño recibirá más inputs, se relacionará con más gente, son cuestiones que hay que valorar también», explica Bautista.

Las instalaciones
Bautista anima a fijarse en las instalaciones del colegio, «sin volvernos locos, porque es importante que el niño tenga opciones pero más importante es que esté bien». Bautista, que dirige una investigación sobre cómo deberían ser las aulas, anima a fijarse en que las aulas no sean estáticas y que ofrezcan al niño un entorno «flexible y sobre todo confortable».
Así mismo, que el colegio cuente con buenas instalaciones para hacer deporte o una oferta interesante de extraescolares puede ayudar a la elección. El comedor, si es de gestión propia o de un catering también será importante tenerlo en cuenta.
¿Qué colegio le viene bien a mi hijo?
Muchos padres buscan también adecuar el colegio a la personalidad de su hijo. Esto es algo que Bautista matiza: «Cuando el niño es mayor, por ejemplo, cuando empieza la secundaria, sí puede adecuarse más su personalidad al colegio, pero con tres años es más complicado». El experto incide en que a esa edad los niños «están por hacer» y buscaría, en general, un proyecto de «educación abierta, enfocada al bienestar».
A los tres años el experto anima a buscar una «educación abierta, enfocada al bienestar»
El experto también aboga por evitar elegir el colegio «en clave de futuro». Preocuparse en exceso o dar prioridad al bachillerato al elegir el centro para un niño de dos años «es un error, ya que tiene 16 años por delante en los que pueden pasar muchas cosas».
Miedo a equivocarnos
Bautista le quita hierro al asunto y afirma que «la elección de centro no es determinante porque nunca será ni un acierto ni un error 100%. Lo importante es sentir que se ha hecho todo lo posible y, sobre todo, influir en el colegio, implicarse».
De sentir que nos hemos equivocado, «lo que hay que hacer es tratar de solucionarlo. Y no estresarse, porque, aunque a priori no es positivo cambiar al niño de centro, no se acaba el mundo por hacerlo», sentencia.


lunes, 27 de enero de 2020

HORARIO DE ATENCIÓN AL PÚBLICO PARA VISITAR EL CENTRO.

Les recordamos que el plazo de inscripción para nuevos alumnos se extiende durante todo el mes de febrero (DEL 3 AL 28 DE FEBRERO)

Siendo un centro pequeño, no vamos a tener sólo un día en exclusiva para enseñar el colegio, explicar cómo funcionamos y cual es nuestra línea pedagógica. 

En nuestro caso estaremos a su disposición, preferiblemente, cualquier miércoles o jueves de 14,00 a 15,00 horas.

En el caso de no poder asistir en este horario, les rogamos nos llamen para concertar una entrevista con ustedes en otro horario.

Atentamente, 
Equipo Directivo.




miércoles, 22 de enero de 2020

Convocatoria admisión alumnado de CLM 2020-21 (Plazo: Del 3 al 28 febrero)



Las fechas proporcionadas por la Administración para este proceso son las siguientes:

Del 3 al 28 de febrero: plazo de presentación de solicitudes.
20 de abril: Publicación del Baremo provisional y solicitantes de cada centro. Reclamaciones hasta el día 27 de abril.
23 de abril: Sorteo público para resolver situaciones de empate (a las 12 h).
21 de mayo: Publicación del Baremo Definitivo y la Resolución Provisional. Reclamaciones hasta el 28 de mayo.
3 de junio: Plazo máximo para renunciar a participar en el Proceso de Admisión de Alumnado.
15 de junio: Publicación de vacantes definitivas y Resolución Definitiva del Proceso de Admisión de Alumnado.
Del 16 al 26 de junio: Plazo de matriculación de alumnado de Educación Infantil y Primaria
Del 25 de junio al 10 de julio: Plazo de matriculación de alumnado de Secundaria y Bachillerato
Del 16 al 23 de junio: Plazo de matriculación extraordinaria de alumnado que…
·        No hubieran obtenido plaza en un centro de su elección.
·        Hermanos/as que se escolaricen por primera vez en la localidad y soliciten ser admitidos en un centro con carácter extraordinario.
·        Alumnado que pueda mejorar la opción adjudicada
– A partir del 24 de junio: Plazo extraordinario de admisión para…
·        Por traslado de localidad.
·        Por circunstancias excepcionales (violencia género o acoso escolar).
·        Alumnado que no haya participado en el proceso de admisión y deba escolarizarse.
·        Alumnado que participó en el proceso, se le adjudicó cambio de centro y repite curso.


miércoles, 15 de enero de 2020

Si quieres que tu hijo tenga buena autoestima, juega con él. (SER PADRES)


La investigación avala la importancia del juego en el desarrollo motor, cognitivo, social y emocional de los niños, pero es importante entender cuáles son las razones que lo fundamentan, en un ejercicio de empatizar con el niño y sus necesidades.
Es especialmente importante que los progenitores puedan compartir con el menor tiempo de juego. De esta manera, el niño sentirá que es alguien querible e interesante, porque es capaz de generar que sus progenitores deseen estar con él y disfrutan interactuando con él. Así, piensa “si mis padres pasan tiempo conmigo y se lo pasan bien es porque soy divertido, interesante, querible.” Por el contrario, si siente que sus padres no pasan tiempo con él o que lo hacen sin disfrutar, puede percibirse como alguien aburrido, sin capacidad para generar interés y que los demás deseen estar con él.
El juego facilita el desarrollo emocional del menor, ya que le ayuda a comprender la realidad y adaptarse a ella, utilizando esta vía como herramienta de asimilación. A través de éste, el pequeño proyecta sus conflictos, intereses, deseos y emociones y puede elaborarlos (con mayor facilidad que a través del lenguaje verbal) por lo que es una herramienta fundamental en la clínica infantil. A través del proceso lúdico el menor elabora sus conflictos, ofreciendo en ocasiones solución a los mismos, y puede expresar sus sentimientos.  A través de personajes, es decir un tercero, puede tomar suficiente distancia emocional como para no sentirse amenazado y poder exponer de forma inconsciente su realidad (conflictos, preocupaciones, deseos e intereses).
Además, gracias a él es posible aprender habilidades de autonomía: por ejemplo, existen juguetes que permiten simular actividades diarias como el cambio de ropa, dar de comer, ducharse o hacer los debes, entre otras. En este proceso, el menor puede reafirmarse en el aprendizaje de su propia autonomía, sintiéndose más capaz.
Por otra parte, jugar  facilita el desarrollo motor de los niños. Específicamente, a través de la motricidad gruesa y fina, la coordinación y el control del movimiento y de su propio cuerpo, así como las capacidades sensoriales.
El desarrollo cognitivo es otro de los grandes beneficiados del juego, ya que facilita el desarrollo de áreas como la percepción, la atención, la memoria, el pensamiento, el razonamiento lógico, la imaginación y el lenguaje. Asimismo, le ofrece la oportunidad de experimentar aciertos y errores y poder aprender. Unido a esto hay que hablar de la creatividad, habilidad necesaria para poder resolver problemas. Los psicoterapeutas solemos explicar en la terapia que cuando llevamos funcionando de la misma manera durante mucho tiempo y no da resultados, debemos probar algo diferente. Esto es buscar soluciones nuevas y alternativas a los mismos problemas, para lo que se necesita creatividad para buscar nuevos caminos.
Finalmente, facilita también el desarrollo social del niño, al permitirle entrenar sus habilidades sociales, interiorizar reglas y normas y permitir un contexto de comunicación e interacción con otros niños.
Para concluir, quisiera resaltar la importancia del juego en la satisfacción de las necesidades emocionales, en esa construcción de sí mismo y su autoconcepto. Conocer y recordar a nuestro niño interior, conectar con él, entenderlo y cuidarlo, es una herramienta muy potente que ayuda en el manejo emocional de los propios adultos y a empatizar con los niños.
Cristina Botella Botín es Psicoterapeuta Infantojuvenil y de Familia de Psicólogos Pozuelo

jueves, 9 de enero de 2020

Casi el 70% de los niños de 10 a 15 años tienen móvil: ¿Cómo educarles en el buen uso de internet?.



La utilización de las nuevas tecnologías por parte de los menores se encuentra ampliamente extendida, tal y como recoge el informe TICH_2019 del Instituto Nacional de Estadística. Sin ir más lejos, el uso del ordenador es muy elevado (lo tienen el 89,7% de los menores) y, aún más, el uso de internet (el 92,9%). Por su parte, el 66,0% de la población de 10 a 15 años dispone de teléfono móvil. Por edades, el uso de smartphones está casi generalizado desde los 14 años, pues con esta edad el 92,5% dispone de uno. Con un año más, la cifra de jóvenes con móvil alcanza el 93,8%.

El comparador de seguros Acierto.com ha realizado un informe que revela algunos comportamientos de riesgo entre los internautas españoles. El objetivo es concienciar a los usuarios de la importancia de llevar a cabo una actitud responsable y segura en la Red. España es el país europeo donde más se navega por internet, con el 87,7% de la población utiliza frecuentemente la red. Muchos de ellos, niños.
En este contexto, cabe preguntarse si los menores españoles están siendo educados en el buen uso de la Red y en las facilidades que puedan tener para acceder a ciertos contenidos no recomendados para su edad.
Una cuestión de educación
El acceso de los niños a internet es una cuestión que preocupa a muchos padres y que, en muchas ocasiones, no se sabe abordar por la falta de referencias. Saber navegar por internet es una cuestión capital de la educación actual. Desde muy corta edad (10 años), los niños tienen acceso a internet, una herramienta que tiene sus pros y sus contras, y a la cual es casi inevitable restringirles el acceso. Por ello, resulta imprescindible saber controlar los tiempos de uso, los lugares a los que acceden y los peligros a los que pueden estar expuestos.

Existen miles de webs que solicitan verificar la mayoría de edad para acceder a ellas. Los sites de marcas de bebidas alcohólicas, chats privados y algunas de contenido sexual, sitúan un formulario al acceder a ellos que se rellena fácilmente. Tanto, que se puede mentir para acceder. Este es uno de los mayores problemas, pues nunca se sabe quién está al otro lado de cualquier conversación; puede ser una organización que sigue los cauces legales para operar en la Red o, en el otro extremo, un ‘depredador de internet’. Su objetivo es chatear -como mínimo- con menores. Según un informe realizado por Unicef, 9 de cada 10 sitios web de abuso sexual infantil, están identificados a nivel mundial, y alojados en Canadá, Estados Unidos, Francia, los Países Bajos y Rusia. Además, el informe afirma que los jóvenes son el grupo de edad más conectado en todo el mundo, el 71% usa internet, por lo que, en proporción, son claramente el grupo más vulnerable a sufrir acoso en la red.

Con motivo de la semana de la ciberseguridad, los expertos del comparador de seguros Acierto.com han recogido una serie de consejos que pueden ayudarte a controlar el acceso a internet de tus hijos:
- Hablar con ellos y enseñarles que la información en internet no es privada, y que el contenido que cuelgan puede que tarde años en desaparecer o no hacerlo nunca.

- Tener el ordenador o cualquier otro dispositivo que usen para acceder a internet en una zona compartida con la familia, evitando que lo usen solos en la habitación.
- Establecer tiempos y horarios para navegar, ya que el uso excesivo puede tener efectos negativos en su personalidad y habilidades para relacionarse con los demás.
- Tener contratada la garantía de asistencia informática en nuestro seguro del hogar, para recibir asesoramiento y soluciones ante cualquier problema que se pueda producir.
- Consultar con frecuencia el historial de navegación o restringir el acceso a determinados sitios webs.
- Actualizar los sistemas de seguridad y enseñar a los niños a no compartir datos personales como edad, dirección o teléfono.
- Hablar con ellos para que no acepten chatear con gente que no conocen o que les pueda resultar extraña.
Actualizar los sistemas operativos de móviles, Android o iOS, pues los fabricantes cada poco tiempo lanzan parches que evitan posibles brechas de seguridad. Igualmente es necesario tener las últimas versiones de las apps que se utilizan, como Whatsapp, Hangouts, ciertas redes sociales…
- Controlar la instalación de aplicaciones, sobre todo de aquellas que cuenten con publicidad insertada en sus servicios, aunque se trate de apps para hacer videos o retocar fotografías.
Cambiar las contraseñas frecuentemente para supervisar cada acceso a cuentas de contenido audiovisual como Netflix, HBO o el propio YouTube.

Este último punto es ciertamente relevante, pues los contenidos de plataformas de distribución como las citadas anteriormente también alojan vídeos no recomendados para ciertas edades, según la catalogación por parte de cada una de ellas. No obstante, es recomendable la configuración de control parental con contraseña para que, en cualquier caso, sea un adulto el que la introduzca en el instante de visualización. De lo contrario, es conveniente cambiarla con frecuencia.

Contraseñas seguras
En base a estos consejos, Acierto.com ha detectado que muchos usuarios no un actúan de forma responsable. Los españoles no solo no mantienen actualizados sus equipos, sino que ignoran cómo debería ser una contraseña segura. En concreto, 2 de cada 5 hacen caso omiso a las notificaciones de actualización automática de su equipo, y hasta el 89% desconoce cómo crear una clave segura que proteja sus datos. Pero solo el 8% es consciente de su propia ignorancia. El resto cree que basta con que no contenga el usuario o con alternar mayúsculas y números.

Este análisis, por otra parte, evidencia que los internautas españoles tampoco son conscientes de la importancia de cambiar esta clave regularmente, al menos cada seis meses. Por desgracia, solo el 20% de los usuarios respeta este margen. Aquí tienen cabida aquellos que lo hacen todas las semanas (un escaso 7%) y los que dejan pasar medio año (el 13%). El resto de los encuestados reconoció no hacerlo nunca (16,7%), casi nunca (30,7%) o muy de vez en cuando (32,4%).

Una buena contraseña, no obstante, debería no solo combinar mayúsculas y números, sino también minúsculas y símbolos o signos de puntuación; y contar con más de ocho caracteres de longitud (cuanto más larga, más segura). Además, debería prescindir del nombre del propio servicio, así como de datos obvios como el nombre, año de nacimiento, palabras malsonantes y similares. Otro fallo recurrente es emplear la misma para todos los servicios. Una buena alternativa es usar un gestor de contraseñas como el llavero de Apple, el de los navegadores u otros online como Dashlane o 1Password.

Artículo extraído del diario ABC.